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Activismo artístico: Reflexiones con Ai Weiwei

  • Foto del escritor: Maria Gabriela Moreno
    Maria Gabriela Moreno
  • 2 jun 2020
  • 2 Min. de lectura


Al hacer un recorrido por las obras de Ai Weiwei podría cualquier espectador quedar impactado, no solo por la belleza de su trabajo, sino por las inspiradoras ideas que conceptualiza en cada uno de ellos. Si miramos de cerca una obra como Safe Passage (2018) es evidente la crítica y denuncia social y política que propone este artista, que al cubrir las columnas de un lugar tan emblemático (Archivo Nacional de Chile) con chalecos salvavidas usados por refugiados de países en conflicto, puso a disposición abiertamente pública su posición frente a las tragedias mundiales. No siendo para menos, Ai Weiwei se ha mostrado como un duro crítico al mundo actual, del cual habla no sin conocerlo, pues al vivir el exilio de su país natal (China) por cuestiones políticas que censuraban y destruían su trabajo por ser totalmente crítico político, ha podido conocer ambos hemisferios del planeta. Es un personaje muy inspirador, en algunas entrevistas expresa su visión y posición, de la que cualquiera que no estuviera de acuerdo debería avergonzarse, pues es totalmente altruista, con propuestas reflexivas muy realistas que motivarían a cualquiera de los lectores a ser artistas activistas.



Volviendo a las cuestiones políticas mencionadas, debe decirse que hablan mucho de su ser, es un hombre que da su vida por el bien común y la libertad de expresión, algo digno de gran admiración, pues hoy en día, como él expresa, estamos cegados por una falsa libertad de la que no podemos hacer uso si no estamos dispuestos a ser por y con los demás. Sin duda alguna, su amplia obra permite la reflexión y visualización de las tragedias mundiales que deberían incumbirnos a todos como seres humanos, sus propuestas invitan a la unión y desintegración de fronteras políticas. Si ser activista implica pensar de una manera equitativa, solidaria y crítica, como artistas deberíamos cada uno de nosotros aspirar a hacer parte de algún movimiento activista.

Otras obras de Ai Weiwei que ampliarán la visión reflexiva de la que se habló anteriormente:


Marea humana: Documental (2017)

Forever bicycles: Instalación (2003) Sunflower seeds: Instalación (2008)



 
 
 

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